Último día de febrero de 2018. Tras los avisos, tras los mensajes, tras los partes,… la nieve llegó. Y llegó a raudales, cubriendo todo Bilbao con su blanco manto. Cuatro vehículos por la calle, dos de ellos atascados. Niños sin clases, con sus padres tirando bolas de nieve por la calle. Tablas de snow en el parque de los patos rascando los minutos de diversión que este lujo nos permite hoy. Trenes circulando difícilmente. Y las personas contemplando el día, el momento, la situación.
Las emociones a flor de piel. Hoy la protagonista es la SORPRESA. A los más pequeños les rebosan los abrigos de atención a la novedad. Algunos se divierten sin medida, otros, precavidos, se sacuden las manos y los pies a cada paso. Hay de todo.
Sólo algunos no pueden ver, sentir, ni disfrutar de este espectáculo. Nuestro vecino, el león de Jado es uno de ellos, pero hay más.
Hoy me acuerdo de todas aquellas personas que no pueden sentir sorpresa, ni alegría, ni precaución ante el espectáculo mágico que tenemos hoy entre nosotros.