Vivir un fallecimiento cercano es algo habitualmente muy duro que requiere de un abordaje cuidadoso. Desde la psicología tenemos algunas claves que podemos aportar.
“El coronavirus aumentó un 7,8% los fallecimientos en Euskadi en el tercer trimestre de 2020” según leemos en prensa.
Por naturaleza, los seres humanos somos sociales (y luego más o menos sociaBLES).
Necesitamos del contacto con otras personas; y así nos agrupamos. Creamos lazos afectivos necesarios para nuestro correcto desarrollo afectivo, desde que somos niños hasta que nos morimos de viejos: toda la vida.
La falta de esas personas relevantes en nuestra vida, sin ninguna duda supone un terremoto emocional, afectivo que nos alerta de nuestra propia supervivencia.
– Podemos tener la idea del ciclo vital.
– Podemos asumir y aceptar que la muerte es parte de la vida: es su final.
Pero en ocasiones queremos defendernos del dolor que nos causan estas dos ideas con el truco más viejo del mundo: la negación.
5/5/2021. Escucha el programa entero pinchando aquí